Dic
06
2014
Categoría: cajón desastre
A estas alturas todos habréis visto tanto el anuncio del sorteo de Navidad de este año como las innumerables parodias que han ido surgiendo a su estela durante las últimas semanas: la de Pablo Iglesias y Rajoy, la de Zubizarreta, la del ruso y todas aquellas (como esta o esta) que dicen ofrecer una «versión realista» de lo que sucedería en un escenario como el que el anuncio original dibuja. La amargura que destilan estas últimas me obliga a escribir estas líneas, porque frente al escepticismo generalizado lo cierto es que una situación como la presentada no es tan anómala como muchos parecen pensar:
Hace ya tres décadas el hermano de mi abuelo regentaba junto a su mujer una pequeña cafetería en Pontevedra. De esas que abrían antes de que saliese el primer rayo de sol y cerraban bien pasado el turno de la cena. Hasta que un año la fortuna quiso recompensar tanto trabajo y sacrificio con el primer premio del sorteo de la lotería. Como en tantos pequeños establecimientos de nuestra geografía, aquellos que frecuentaban el local conformaban ya un grupo de amigos, casi una familia, que tenían por costumbre comprar y compartir en la cafetería su lotería. En aquel sorteo, sin embargo, dos de los asiduos faltaron a su cita con la suerte y no pudieron comprar su participación: el primero por encontrarse de viaje, el segundo por atravesar una situación económica complicada.
Lo bonito de la historia, o sorprendente para tantos, es que mi tío, sin dudarlo, hizo entrega a ambos de sus respectivos décimos. Sin que los otros se lo reclamaran. Sin pedir nada a cambio. Sus nietos, mis primos, cuentan como cada vez que se cruzan con alguno de ellos todavía hoy recuerdan emocionados el gesto de mi tío.
En esta época, más que nunca, creo que merece la pena recuperar y compartir pequeñas historias como esta, capaces de devolvernos, al menos por unos instantes, la fe en nuestros semejantes.
Nov
20
2014
Categoría: cajón desastre
Dice nuestra amiga la Wikipedia que la inflación es «el aumento generalizado y sostenido de los precios de los bienes y servicios existentes en el mercado durante un período de tiempo».
Para hacerlo más fácil, aplicando el dicho de que una imagen vale (con frecuencia) más que mil palabras:
Echando algún número rápido: si asumimos que han transcurrido 30 años desde que se comercializaban los Don Miki originales hasta el reedición que hoy podemos encontrar en los kioskos, haber pasado de las 60 pesetas de entonces a los 6 euros de hoy implica que el precio se ha multiplicado por 16, lo que equivale a que durante este periodo la inflación media ha sido del 10% anual.
Ya sabéis, si este diciembre tenéis suerte con la lotería de Navidad y os da por echar cuentas para ver si metiendo lo ganado bajo el colchón os podéis retirar de trabajar, tened en cuenta que es posible que ese dinero, dentro de 30 años, no valga ni la décima parte de lo que vale hoy.
Oct
16
2014
Categoría: cajón desastre
Hastiado de ver una y otra vez las mismas barbaridades de mis queridos conciudadanos a la hora de salir de una glorieta no me resisto a reproducir aquí un gráfico muy clarito recientemente compartido por la Dirección General de Tráfico.
A ver si alguno aprende.
Oct
06
2014
Categoría: forecasting
Antes de pasar a la chicha, un obligado disclaimer: las opiniones, recomendaciones y estimaciones recogidas en aquí en ningún caso pretenden ser una recomendación de compra o venta de instrumentos financieros, y se presentan solamente con fines informativos y por el interés de los lectores del blog. Declino toda responsabilidad de los daños o perjuicios que puedan derivarse del uso de esta información.
En mi post anterior Big data: deportes, bolsa y política, comentaba cómo buena parte de los que nos hemos dedicado al mundo de la analítica predictiva hemos intentado suerte en algún momento con la previsión de los mercados bursátiles. No soy una excepción y desde hace algún tiempo tengo un par de modelos cuyos resultados utilizo como referencias de apoyo en mis sistemas de inversión. En respuesta a los comentarios de lectores del blog interesados en el tema, comparto algo más abajo, a título ilustrativo, los escenarios que a día de hoy manejo de aquí a final de año para los índices de referencia en Europa y España (EuroStoxx50 e IBEX respectivamente).
Un comentario rápido antes de pasar a ver los resultados del modelo: si ya el previsible efecto demo me hacía estar convencido de que el hecho de publicar estas previsiones son la mayor garantía para dar por hecho que fallarán estrepitosamente, lo cierto es que parece que tenemos todavía más papeletas para ello: las previsiones del modelo para este último trimestre del año son de carácter alcista (de hecho implican superar máximos anuales), en oposición a lo que parece ser la visión de consenso de los analistas bursátiles que, a la vista de la evolución de las bolsas estas últimas jornadas auguran unos últimos meses de 2014 complicados.
Dicho todo esto, los números:
Escenario de referencia 31/12/2014 para el EuroStoxx50 (cierre del viernes: 3.133): 3.316 – 3.524
Escenario de referencia 31/12/2014 para el IBEX (cierre del viernes: 10.567): 11.345-12.055
Hablamos en tres meses.
A estas alturas todos habréis visto tanto el anuncio del sorteo de Navidad de este año como las innumerables parodias que han ido surgiendo a su estela durante las últimas semanas: la de Pablo Iglesias y Rajoy, la de Zubizarreta, la del ruso y todas aquellas (como esta o esta) que dicen ofrecer una «versión realista» de lo que sucedería en un escenario como el que el anuncio original dibuja. La amargura que destilan estas últimas me obliga a escribir estas líneas, porque frente al escepticismo generalizado lo cierto es que una situación como la presentada no es tan anómala como muchos parecen pensar:
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